¿Quién fué San Wenceslao?
Si has paseado por la Ciudad de Praga reconocerás su figura representada un numerosos lugares de esta mágica ciudad marcada por la historia. Reconocido y recordado, ¿cual fue su historia? comencemos desde el principio, su origen.
Proveniente de la dinastía de los Premyslidas, la primera dinastía que se sentó en el territorio que a día de hoy conocemos como República Checa alrededor del siglo IX, San Wenceslao fue un dirigente nacido en el año 907 d.C. Llegó a ser soberano del territorio conocido antes como Bohemia. Su etapa de soberanía se inició en el año 924, cuando su padre murió 3 años antes y se inició una pequeña etapa de inestabilidad que terminó con la subida al trono de San Wenceslao.

El gobernante que prefirió paz en lugar de guerra
Expandió la fe cristiana por el territorio de Bohemia. Seguidamente, inició una etapa de paz en este territorio, debido a las negociaciones que tuvo con Enrique I el Pajarero cuando este, dirigente del Sacro Imperio Romano Gérmanico, intentó invadir el territorio de Bohemia.
San Wenceslao frenó ese intento vendiendole 129 vacas y 500 monedas de oro al año. Por tanto, se le reconoció como un gobernante que prefería la paz a la guerra, cosa bastante extraña en el siglo X. Otra muestra de su buena metodología es cómo, San Wenceslao, modificó el sistema judicial y de leyes, reduciendo las condenas.
Por último, no menos importante, debido a esos tratos pacíficos con el Sacro Imperio Romano Gérmanico, se le otorgó un pequeño regalo: el cofre con el hombro de San Vito. En el siglo X, empieza la construcción de una capilla o rotonda rómanica en el lugar donde hoy está situada la famosa Catedral de San Vito de la ciudad de Praga.

La muerte de San Wenceslao, homicidio
La muerte de San Wenceslao fué trágica. La historia nos cuenta que su propio hermano, Boleslav, el cual quería subir al poder a costa de San Wenceslao, en una fiesta celebrada en Stara Boleslav, apuñaló con una lanza a su propio hermano, dejándolo clavado en una puerta.
Boleslav subió al poder, pero se dice que dos días después del asesinato, arrepentido, recogió el cuerpo de San Wenceslao llevándolo hasta lo que sería hoy la Catedral de San Vito, donde reposan sus restos y convertido en centro de peregrinaciones. Tras su oscura muerte, comenzó aceleradamente una acción de reconocimiento como mártir al soberano, impulsada incoherentemente por su hermano Boleslav.
Ocurrió en el 28 de septiembre del año 929 aunque, algunas informaciones históricas, apuntan que podría haber sido un poco más tarde, el año 935.

San Wenceslao, Santo Patrón de la República Checa
¿Qué representa San Wenceslao para los checos a día de hoy?
San Wenceslao fue convertido en el Santo Patrón de la República Checa. Por tanto, cada 28 de septiembre se celebra su festividad.
Ahora pensaréis…”Pero si los checos son ateos o agnósticos en su gran mayoría, ¿qué pinta un Santo Patrón?” Y es que San Wenceslao, para los checos, no es solamente un mártir o uno de los Santos más antiguos de Europa, es un símbolo de su historia y de su origen.
Cada 28 de septiembre se prepara una gran fiesta por todos los alrededores de la ciudad de Praga, venerando a uno de sus más grandes soberanos.
Por último, evidentemente, la plaza más famosa del país (con perdón de la Plaza de la Ciudad Vieja), se llamará Plaza San Wenceslao (Vaclavske Namesti) testigo de grandes hechos históricos, tanto positivos como negativos para esta nación. Y, como no podría ser de otra manera, está coronada con la figura de San Wenceslao montando en caballo, rodeado de los cuatro Santos Checos: Santa Ludmila (abuela de San Wenceslao), San Procopio, Santa Inés de Bohemia y San Adalberto de Praga.
Su abuela Santa Ludmila, dedicada a la educación de su nieto, alentadora del alzamiento al trono de Wenceslao para la salvaguardia del Cristianismo, motivo responsable de su muerte, asesinada por los nobles, posteriormente reconocida como Santa y Patrona de la República Checa
Imponente, se alza a caballo, presidiendo la Plaza a la que hace honor su nombre, dando paso al Museo Nacional.

Pasea por las calles de Praga descubriendo a San Wesceslao en sus rincones, fachadas, palacios, iglesias y por su puesto en su Catedral de San Vito, centro de peregrinaciones.

Muy fan de este señor
Me gustaLe gusta a 1 persona
Nosotros también Rodrigo! Gracias por comentar
Me gustaMe gusta
Un grande San wenceslao
Me gustaLe gusta a 1 persona